Las razas porcinas mediterráneas y su impacto ambiental

Articulo esrito por Francisco Gonzalez, Product Manager Porcino de TEGASA, en colaboración con la Universidad de Extremadura

El cerdo Ibérico y la mayor parte las razas de cerdos Mediterráneos, han sido consideradas como cerdos autóctonos tradicionalmente vinculados al medio en los que se han desarrollado, con libertad de movimientos y alimentación basada en recursos naturales. Sin embargo, se conoce poco sobre el papel medioambiental desempeñado por estas razas, y en la actualidad, los sistemas productivos respetuosos con el medio están ganado reconocimiento. Además, en el futuro la contaminación generada por las granjas porcinas será objeto de una regulación más rígida de la que existe hoy día, debido a la rápida expansión experimentada por este tipo de producción en los países desarrollados.

El 34 % de los gases de efecto invernadero generados en la producción de carne de cerdo, corresponden a las fases de cría y engorde de los animales. Para esta finalidad, España importa maíz y soja de más de 39 países diferentes. Estos flujos de mercado ocasionan una gran cantidad de CO2, y añadido a esto, los sistemas de producción porcina intensivos generan una gran cantidad de purines. En este punto, es importante remarcar los sistemas tradicionales de producción de cerdo Ibérico caracterizados por un ciclo de producción largo y una baja densidad de animales, donde los residuos orgánicos generados no son un problema medioambiental añadido.

En conclusión, las implicaciones medioambientales de la producción de cerdos mediterráneos en condiciones extensivas, aún no se han cuantificado y deben ser estudiados. Por tanto, se necesita un mayor número de investigaciones que desarrollen prácticas respetuosas con el medio ambiente evitando así impactos medioambientales innecesarios.